
de Vanuu Aguirre, el Miercoles, 30 de marzo de 2011
Cuando tengamos que tomar una decisión importante, escuchemos a nuestro corazón, a nuestra sabiduría interior, especialmente cuando hallemos de tomar una decisión sobre un regalo del destino como es un Alma Gemela.
El destino depositara su obsequio directamente sobre nuestros pies, pero lo que decidamos hacer a partir de entonces con él es algo que depende de nosotros. Si confiamos únicamente en lo que nos dicen los demás, es probable que cometamos errores muy graves. Nuestro corazón sabe lo que necesitamos, los demás tienen otros intereses.
Si una de las dos almas esta menos desarrollada y es más ignorante que la otra, la violencia, la codicia, los celos, el odio y el miedo pueden enturbiar la relación.
Tales sentimientos son nocivos hasta para el alma mas evolucionada, aunque se trate de un alma gemela. Es habitual que fantaseemos con ideas como:” yo puedo cambiarle” o “puedo ayudarle a crecer”. Si la otra persona no deja que la ayudemos, si ha decidido que no quiere aprender ni evolucionar, la relación está condenada al fracaso.
Tal vez surja otra oportunidad en otra vida; a no ser que la persona en cuestión tome consciencia más adelante. A veces se producen estos despertares tardíos.
En algunos casos las almas gemelas deciden no casarse mientras están encarnadas. Permanecen juntas hasta que cumplen el pacto acordado y después siguen su camino. Sus intereses y los planes que tienen para el resto de su vida son diferentes, y no quieren ni necesitan pasar una vida entera juntas. Esta no es una tragedia, sino una simple cuestión de aprendizaje: tienen por delante una vida entera juntas, pero a veces es posible que necesiten tomar unas clases por separado...